Funcionaria de la Quinta Comisaría de Carabineros Panguipulli
LA ACCIÓN DE LA CABO 1ero. MARIELA ASENJO OVANDO: CUANDO EL ESPÍRITU DE SERVICIO PÚBLICO VA MÁS ALLÁ DEL DEBER

10/11/2013
El pasado 6 de noviembre la Cabo 1ero. Mariela Asenjo Ovando, de dotación de la Quinta Comisaría de Carabineros Panguipulli, acudió a un procedimiento, el que más tarde reflejaría su verdadero espíritu de servicio, incluso más allá del deber.  

LOS HECHOS

Un llamado al nivel 133 alertó a Carabineros de Panguipulli para dar inició a un procedimiento por hurto, con pasajes poco común en cuanto al modus operandi, al menos en Panguipulli, por parte de una pareja de antisociales que operaron en una farmacia del centro de la ciudad, y para lo cual utilizaron un coche en el cual procedieron a ocultar las especies sustraídas. Lo particular del hecho delictual es que en el interior del coche se encontraba una lactante cuya edad no sobrepasaba los 3 meses y quien al momento en que carabineros realizaba el control de identidad fue abandonada por su madre, la que más tarde sería detenida junto a su pareja. Ambos sujetos provenían de Temuco.

 ACCIÓN DE LA CABO MARIELA ASENJO  OVANDO

Tras la realización del procedimiento señalado, la lactante fue trasladada hasta la Quinta Comisaría de Carabineros Panguipulli donde la Cabo Asenjo le brindó un especiales cuidado y cariño, un cuidado de madre.  En la unidad policial se procedió a  asear, cambiar pañales y brindar atención a la menor, pero el espíritu de servicio  de la funcionaria señalada fue mucho más allá, ya que la niña también tenía hambre, y fue en ese momento en que no dudó a amamantar a la lactante. Una acción digna de felicitar y destacar.

Mariela Asenjo Ovando, Cabo 1ero. de Carabineros.

El pasado viernes  El Diario Panguipulli.cl  encontró a la Cabo 1ero. Mariela Asenjo Ovando realizando un servicio, oportunidad en que le preguntamos por su acción. Señala  que “al momento en que tomé a la bebé, esta  se encontraba con sus pañales completamente orinados; la acogimos en la unidad policial, la mudamos, le dimos la debida atención”, y no duda en reconocer con absoluta seguridad que “uno como mamá tiende de inmediato a cuidar a un lactante”.

Consultada si en su función se dan hechos, cada cierto tiempo, como el que le correspondió vivir, donde adultos utilizan a sus hijos de tan corta edad para este tipo de ilícitos, la Cabo Asenjo afirma que “eso en ciudades grandes se suele ver. Estas personas eran de Temuco. En Panguipulli es primera vez que soy parte de un procedimiento en donde la madre de una menor prefiere arrancar antes que socorrer a su hija”.

Lo que queda claro es que la madre de la lactante con el fin de evitar la detención prefirió dejar abandonada a su hija: “Claro, dejó a la lactante en el coche con el papá”.

Todos conocemos, en cierto modo, las funciones de Carabineros de Chile, pero aquí hubo un caso distinto a lo habitual en un procedimiento, muy diferente. La Cabo Asenjo procedió a amantar a la lactante cuando esta lloraba porque  tenía hambre: “Al registrar el coche no había pañales, sólo un sobre de leche pero no había mamadera. Soy madre de una menor que tiene un año y nueve meses, todavía estoy amamantando a mi hija, así es que  aproveché de dar leche materna a la menor la cual lloraba de hambre”.

“Lo que pasa es que un gesto como ese una mamá lo haría por cualquier menor”, asegura la funcionaria, para quien su espíritu de verdadero servicio público esta vez fue mucho más allá del deber. Felicitaciones.